viernes, 26 de abril de 2013

Madurar es dejar ir a quien ya no se quiere quedar.

Me hubiese gustado tener un manual para enfrentarme a la vida, pero con el tiempo me he dado cuenta de que tienes que tener experiencias para aprender a vivir. Es verdad que a veces las cosas no salen como queremos y últimamente parece como si todo se hubiese vuelto en contra, a veces siento que no voy a poder con todo y tengo ganas de tirar la toalla entonces me paro y pienso en aquellas pequeñas cositas cotidianas que nos dan alegría día a día, una sonrisa, una canción que suena en la radio llena de recuerdos, reírme sin parar con una amiga o un mensaje de alguien inesperado. Te preguntarás por qué te estoy contando esto, y es que quiero que la gente sepa que si afrontamos la vida con optimismo, podemos darle la vuelta a esta situación que vivimos y ser cada día un poquito más felices.

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Veeeeenga, seguro que te encanta la entrada de hoy :D